La micropigmentación es una técnica que consiste en aplicar en la capa más externa de la piel, en la epidermis, pigmentos hipoalergénicos en polvo mediante una aguja muy fina.
Esta técnica vendría a ser algo similar a hacer un tatuaje, pero no lo es y además es temporal.
Prácticamente cualquier imperfección puede ser ocultada mediante la micropigmentación. Por ejemplo, se utiliza para tapar cicatrices, ya que existe una gran variedad de tonos que facilitan su camuflaje, así como también se puede jugar con la profundidad y crear un aspecto muy natural.
¿Qué es la micropigmentación?
Mediante la micropigmentación se aplican pigmentos naturales en la piel, de un tono o tonos concretos, lo que permite disimular cualquier tipo de imperfección, desde una pequeña cicatriz en la comisura de los labios hasta una más grande en la cabeza para camuflar injertos capilares o heridas.
Lograr el efecto deseado, que es aquel que parece natural y no deja marcas, resulta complicado. La clave es encontrar el tono perfecto y saber aplicarlo en cada zona mediante un trabajo preciso.
No cualquier persona puede practicar la micropigmentación. Para ello hay que superar un curso que otorga un título oficial. Esto hace que quienes se dediquen a ello cuenten con las nociones básicas sobre desinfección, esterilización, conocimientos sobre la piel y microbiología. No hay que olvidar que se van a utilizar agujas en la piel.
Cuándo usar la micropigmentación en cicatrices
Algunas personas sufren por sus cicatrices, que pueden ser antiestéticas por su forma, tamaño o simple presencia. Existen tratamientos estéticos que permiten eliminar las cicatrices, pero para quienes no pueden permitírselo o simplemente prefieren otra solución, la micropigmentación es una solución muy demandada y con buenos resultados.
Antes de realizar esta técnica sobre cualquier cicatriz, suele realizarse un estudio de la misma, para concretar los detalles de la actuación. La dificultad del procedimiento dependerá del tipo de piel, de la herida, de la edad, del cuidado diario y del nivel de exposición solar.
Hay que tener en cuenta que no se puede, o no se debe realizar sobre todas las cicatrices. En primer lugar, las cicatrices deben ser antiguas. Esto quiere decir que tienen que haberse producido unos 6 meses antes. Esto es debido a que durante ese tiempo, la marca sigue cambiando de color.
Tampoco puede aplicarse sobre cicatrices queloides, que son las que se extienden más allá de la herida. Así como tampoco si existen puntos más profundos o es muy grande.
Tipos de micropigmentación para cicatrices
En función de la razón por la que se realiza, se distinguen dos tipo de micropigmentación:
- La micropigmentación estética es la que se utiliza para eliminar imperfecciones del rostro, como perfilar labios, las líneas de los ojos, pigmentar pestañas o arreglar cejas.
- Y la micropigmentación paramédica es la que se aplica para tapar cicatrices en cualquier parte del cuerpo, producidas por heridas, cirugía, etc. También entra en este tipo de micropigmentación la reconstrucción de las areolas mamarias.
¿Cuánto dura la micropigmentación de cicatrices?
El efecto de la micropigmentación de cicatrices es casi inmediato. En cuanto baje la hinchazón por la inflamación se verán los resultados.
Sin embargo, no se trata de un tratamiento permanente. Esto se debe a que los pigmentos se inyectan en la epidermis, que los va absorbiendo y están expuestos a más agentes externos.
Los expertos coinciden en señalar que la micropigmentación puede durar hasta 4 años, aunque la media es de 2 años,pero no todos los casos son iguales. Se recomienda aplicar pequeñas repeticiones
El color de la piel (menos duración cuanto más oscura), la profundidad de la cicatriz y el producto utilizado, también influirán en la duración de la micropigmentación de la cicatriz.
Como en casi todos los casos de tratamientos estéticos, y este no es excepción, la combinación de varios da como resultado mejoras evidentes. En este caso, antes de la micropigmentación, se puede utilizar otros tratamientos como la electroporación, para incrementar la producción de colágeno y elastina mediante la introducción de vitaminas y otras sustancias regeneradoras.