La electroporación transdérmica es una tecnología que posee la capacidad de estimular la regeneración celular y mejorar la absorción de ingredientes activos. Mediante este procedimiento no invasivo podemos abordar la cicatrización de la piel de una forma totalmente diferente.
Esta tecnología se vale de pulsos eléctricos para crear poros temporales en la membrana celular, facilitando así la entrada de moléculas más grandes, como pueden ser medicamentos, vitaminas o ácido hialurónico. En el caso que nos ocupa, permite la entrega efectiva de ingredientes activos que estimulan la regeneración y la reparación de la piel.
Electroporación para cicatrices
Antes de iniciar un tratamiento de electroporación para cicatrices, se lleva a cabo una evaluación inicial, que incluye un análisis del tipo de cicatriz, la salud general de la piel y el historial médico del paciente.
A continuación, se prepara la piel limpiándola a fondo para eliminar cualquier impureza, y a menudo se aplica un gel conductor en la zona a tratar, que puede contener ingredientes activos diseñados para abordar el tipo de cicatriz en cuestión. Cada sesión suele durar entre 20 y 30 minutos, y el número de sesiones necesarias depende de la gravedad de las cicatrices.
Tras el tratamiento, es común experimentar enrojecimiento o una leve sensación de ardor en el área tratada, pero estos efectos suelen ser temporales. Es esencial evitar la exposición solar y usar productos específicos para calmar la piel tras el tratamiento.
A la hora de tratar cicatrices, la electroporación actúa de varias maneras:
- Estimulación de la regeneración celular: en primer lugar, la electroporación ayuda a estimular la producción de colágeno y elastina, dos componentes esenciales para la salud y la elasticidad de la piel. Esto es especialmente importante en cicatrices, que a menudo carecen de la firmeza y elasticidad del tejido sano.
- Mejora de la circulación: la aplicación de pulsos eléctricos también puede mejorar la circulación sanguínea en el área tratada, promoviendo un mejor suministro de nutrientes y oxígeno a las células de la piel.
- Aumento de la absorción de ingredientes activos: y, por último, al conseguir que los principios activos penetren más profundamente en la piel, se consigue mayor eficacia en los tratamientos que contienen ingredientes regenerativos, como el ácido hialurónico, factores de crecimiento y péptidos.
Aunque la electroporación es generalmente segura, es importante que el tratamiento sea realizado por profesionales capacitados para minimizar riesgos. Además, se deben considerar ciertas contraindicaciones, como:
- Infecciones cutáneas activas.
- Enfermedades autoinmunes.
- Uso de marcapasos o dispositivos electrónicos implantables.
Tipos de cicatrices que se pueden tratar
Como ya sabes, existen diferentes tipos de cicatrices. La electroporación es efectiva en en la siguientes:
- Cicatrices de acné: pueden ser tratadas con electroporación, que ayuda a suavizar la textura de la piel y a mejorar su apariencia general.
- Cicatrices queloides e hipertróficas: este tipo de cicatrices son a menudo más prominentes y pueden beneficiarse del tratamiento, ya que la electroporación puede ayudar a disminuir la hiperplasia y promover una curación más uniforme.
- Cicatrices postquirúrgicas: las cicatrices que resultan de intervenciones quirúrgicas pueden mejorar con la estimulación del colágeno y la regeneración celular facilitada por la electroporación.
Beneficios de la electroporación para cicatrices
Un grupo de investigadores de la Universidad de Tel Aviv y de la Universidad de Harvard, ya realizaron en el año 2016 un estudio con electroporación en el que consiguieron reducir el área de cicatrices producidas por quemaduras. Para entonces, el uso de la electroporación no estaba tan extendido como en la actualidad.
- Procedimiento no invasivo: la electroporación es una alternativa no invasiva a los tratamientos quirúrgicos para cicatrices, lo que significa menos riesgos y un tiempo de recuperación más corto.
- Resultados visibles: muchos pacientes notan mejoras significativas en la textura y apariencia de sus cicatrices después de varias sesiones.
- Personalización del tratamiento: se puede adaptar el tratamiento a las necesidades específicas de cada paciente, eligiendo los ingredientes activos más adecuados para el tipo de cicatriz.
- Mínimos efectos secundarios: en comparación con otros tratamientos, la electroporación tiene pocos efectos secundarios, lo que la convierte en una opción atractiva para muchos pacientes.