Los efectos positivos del deporte en el cuerpo son un hecho contrastado. Las mejoras físicas y mentales han sido demostradas en numerosos estudiosos. Lo que no es tan conocido, o quizá no tan recomendado, es la práctica del ejercicio físico para complementar o potenciar los efectos de los tratamientos estéticos.
Con los tratamientos estéticos buscamos mejorar nuestra apariencia y seguridad en nosotros mismos. Con el deporte, como si hablásemos de un tratamiento más, conseguimos maximizar y prolongar los resultados obtenidos a través de estos procedimientos.
El ejercicio regular no sólo beneficia nuestra salud en general, sino que también es un aliado invaluable para potenciar los efectos de los tratamientos estéticos y mantener los resultados a largo plazo. Por ello, a continuación ahondaremos en los beneficios del deporte tras los tratamientos estéticos.
La importancia del deporte tras tratamientos estéticos
Los tratamientos estéticos ofrecen resultados notables y satisfactorios, pero para mantenerlos a largo plazo, es fundamental adoptar un enfoque global que incluya el ejercicio y la actividad física en la rutina diaria. Podrías dejar que el tratamiento actúe y cumpla su función durante el tiempo que corresponde, pero ¿por qué no prolongar los resultados sin coste? Incluso algunos tratamientos estéticos, como la liposucción, pueden verse afectados negativamente por el aumento de peso posterior, lo que subraya la importancia del ejercicio regular para mantener una figura equilibrada y saludable.
Además, algunos procedimientos de rejuvenecimiento facial, como el bótox o el ácido hialurónico, pueden durar más tiempo y ser más efectivos en una piel bien cuidada y tonificada. El deporte, al mejorar la circulación y el flujo de nutrientes, puede ayudar a prolongar la durabilidad de estos tratamientos y reducir el riesgo de futuras intervenciones.
Beneficios del deporte
- Cuando hacemos deporte, sea cual sea, estimulamos la circulación sanguínea en todo el cuerpo, lo que aumenta el suministro de nutrientes y oxígeno a las células de la piel y los tejidos tratados. Esta mejora en la circulación ayuda a acelerar la regeneración celular y la eliminación de toxinas, lo que contribuye a una recuperación más rápida y efectiva tras los tratamientos estéticos.
- El ejercicio estimula la liberación de hormonas y factores de crecimiento en el cuerpo. Algunas de estas sustancias, como el factor de crecimiento insulínico (IGF-1), están relacionadas con la producción de colágeno y elastina.
- También sirve como una poderosa herramienta para reducir los niveles de estrés y ansiedad, lo que puede tener un impacto positivo en la durabilidad de los resultados estéticos. Menor estrés significa menor liberación de hormonas que afectan la salud de la piel y el cabello, ayudando a mantener su aspecto saludable.
- Muchos tratamientos estéticos buscan mejorar la apariencia de la piel y reducir la flacidez. El ejercicio, especialmente los ejercicios de resistencia y entrenamiento con pesas, fortalece y tonifica los músculos, lo que puede ayudar a potenciar los efectos de dichos tratamientos.
- El ejercicio cardiovascular y los entrenamientos de alta intensidad son efectivos para quemar grasas y mantener un peso saludable. Si bien los tratamientos estéticos pueden ayudar a reducir depósitos de grasa localizados, el ejercicio regular es clave para evitar la acumulación futura de grasa y mantener los resultados logrados.
¿Qué deportes son los mejores tras tratamientos estéticos?
A la hora de elegir los mejores ejercicios físicos para potenciar o mantener los efectos de los tratamientos estéticos, debemos evaluar qué beneficios ofrece cada uno y cómo pueden estos alinearse con los objetivos del tratamiento estético. Por ello, hemos seleccionado estos cuatro ejercicios:
- El levantamiento de pesas ayudan a fortalecer y tonificar los músculos. Cuando se combinan con tratamientos de reducción de grasa o eliminación de celulitis, estos ejercicios pueden ayudar a tonificar los músculos y mejorar la apariencia general de la piel y los tejidos tratados. Los músculos tonificados pueden dar una apariencia más firme y definida al cuerpo, complementando los efectos de ciertos tratamientos estéticos.
- Ejercicios cardiovasculares: como correr, nadar, ir en bicicleta o cualquier otro ejercicios de cardio, son excelentes para quemar calorías y grasas. Al incorporar ejercicios cardiovasculares en la rutina de ejercicio después de tratamientos de contorno corporal o eliminación de grasa localizada, se puede ayudar a mantener el peso y los resultados obtenidos. Además, estos ejercicios mejoran la salud cardiovascular y contribuyen a una mejor circulación sanguínea, lo que puede beneficiar la apariencia de la piel..
- Yoga y Pilates: estas disciplinas ayudan a mejorar la flexibilidad, el equilibrio y la postura. Estos ejercicios pueden complementar los resultados de procedimientos estéticos faciales y corporales, ya que una buena postura puede realzar la apariencia de la figura y ayudar a mantener una apariencia rejuvenecida. Además, el yoga y el Pilates son ejercicios de bajo impacto que pueden ser beneficiosos para aquellos que buscan una forma de ejercicio más suave..
- Deportes acuáticos: la natación y el aquaeróbic son ideales para tonificar los músculos, mejorar la circulación y reducir la retención de líquidos. Estos ejercicios pueden ser especialmente efectivos para complementar tratamientos estéticos en áreas como las piernas y los glúteos, ya que el agua proporciona resistencia adicional que ayuda a fortalecer los músculos. Además, los deportes acuáticos pueden ayudar a reducir la retención de líquidos y mejorar la apariencia general de la piel
Más allá de los beneficios que el deporte ofrece para prolongar los efectos de los tratamientos estéticos, el ejercicio físico debe formar parte siempre de nuestra rutina. No hace falta mucho tiempo al día, solo que este sea habitual. Las personas que no realizan ningún tipo de actividad física de forma regular, pueden experimentar efectos negativos en su salud física y mental. Aumenta la pérdida de masa muscular, sufren mayor riesgo de enfermedades cardiovasculares, pérdida de masa ósea y el sedentarismo está asociado al aumento de peso, estrés y ansiedad.
La combinación de tratamientos médico-estéticos de calidad con una rutina de ejercicio regular y una dieta equilibrada es la clave para alcanzar y mantener una figura moldeada y una apariencia rejuvenecida. Ahora bien, antes de iniciar cualquier deporte, consulta siempre con un profesional médico para comprobar que sea seguro y adecuado para tus necesidades individuales y compatible con el tratamiento.