La cavitación es una técnica que se utiliza en medicina estética para eliminar la acumulación de grasa corporal mediante la aplicación de ultrasonidos de baja frecuencia.
Este proceso provoca la implosión de microburbujas de gas, generando ondas de choque que terminan rompiendo las células grasas. El contenido se libera en forma líquida y es finalmente eliminado del cuerpo a través del sistema linfático y el urinario.
¿Qué hace la cavitación con la grasa?
La cavitación emplea ultrasonidos de baja frecuencia. Los ultrasonidos emiten ondas sonoras que penetran en la piel y alcanzan las capas subcutáneas donde se encuentra el tejido adiposo.
Al mismo tiempo, los ultrasonidos provocan la formación de burbujas de gas en el líquido intersticial, que es el que rodea a las células grasas.
Estas burbujas van creciendo, como si fuese un globo, hasta que finalmente implosionan. Esto conlleva una liberación de energía que rompe las células de grasa, liberándose su contenido al líquido intersticial.
Finalmente, este contenido es transportado por el sistema linfático y el sistema circulatorio, hasta que es eliminado de forma natural por el cuerpo.
Por tanto, la cavitación elimina la grasa localizada, consiguiendo el gran objetivo de reducir el volumen corporal. Para ello, se utiliza un manípulo que se desliza por la zona a tratar previa aplicación de un gel conductor o crema.
Actualmente, en el mercado podemos encontrar diferentes tipos de dispositivos médico-estético de cavitación. Sus características varían en potencia, frecuencia y modo de aplicación.
Aunque, principalmente, podemos destacar tres tipos: la cavitación de baja frecuencia, la de alta frecuencia y el HIFU.
- La de baja frecuencia penetra más profundamente. Esto que podría parecer una ventaja, realmente se convierte en una desventaja porque no permite actuar sobre una zona acotada.
- Por su parte, la de alta frecuencia, como la Cavitacell V2 de Sisneo, no alcanza capas tan profundas, pero permite tratar zonas pequeñas y superficiales.
- Por última, el HIFU emplea ultrasonidos de alta intensidad, lo que permite alcanzar una precisión mayor.
Aunque la cavitación, por sí sola, puede dar resultados muy buenos, la combinación con otros tratamientos como la radiofrecuencia o la electroporación, logrará multiplicar el resultado.
¿Cuándo se empieza a notar la cavitación?
Como siempre, el uso de la cavitación y la duración del tratamiento dependerá de cada persona. La cantidad de grasa a eliminar también influirá en esta decisión. Aunque no será hasta después de 2 o 3 sesiones cuando se verán resultados notables, ya en la primera sesión se pueden apreciar cambios en el volumen corporal, que además son permanentes, siempre y cuando se les acompañe con un estilo de vida saludable.
De nada servirá invertir dinero en un tratamiento de cavitación si después no seguimos una alimentación saludable y no hacemos ejercicio físico, porque al final habrá un efecto rebote. Esto es muy importante que lo sepa el cliente final, quien se va a someter al tratamiento, pero también que lo recalquen los profesionales que se dedican a esto.
Ventajas respecto a otras técnicas
Si comparamos con otras técnicas, nos daremos cuenta de que la cavitación no tiene rival, pero porque ningún otro tratamiento actúa de la misma manera.
Por ejemplo, por sus características la radiofrecuencia podría aproximarse a los resultados de la cavitación, pero en realidad no conseguirá una grado tan alto de reducción de volumen corporal.
La cavitación ofrece beneficios como la reducción real del volumen corporal en las áreas tratadas, mejora la apariencia de la piel por el efecto del calor y estimula el sistema linfático, lo que puede ayudar a eliminar toxinas del cuerpo.
Esta reducción está demostrada científicamente a través de diversos estudios. Uno de ellos¹, realizado en el año 2018, reveló una reducción de la circunferencia abdominal de entre 2 a 4,6 cm.
Es muy importante señalar que la cavitación no es un tratamiento para perder peso. Ningún tratamiento médico-estético lo es, en realidad. La cavitación tiene como objetivo eliminar la grasa localizada y al hacerlo conseguiremos reducir el volumen, moldear el cuerpo y una mejor apariencia.
Contraindicaciones de la cavitación
La cavitación es un tratamiento, en principio, seguro pero que debe ser realizado por profesional experto y evitarse en algunas situaciones.
Por ejemplo, no debe aplicarse en mujeres embarazadas o en período de lactancia, personas con problemas de corazón o circulación, y tampoco en personas con cáncer, enfermedades hepáticas o renales.
Además, puede provocar algunos ligeros efectos secundarios como enrojecimiento, hinchazón o sensibilidad en el área tratada.
¿Por qué se acumula la grasa?
Nuestro cuerpo acumula grasa porque la utiliza como aislante térmico y reserva de energía. Es algo inevitable. Ahora bien, cuando esa reserva de grasa excede las niveles normales, puede volverse peligrosa y potenciar diversos problemas de salud como la diabetes y enfermedades cardiovasculares.
Existen varios factores que contribuyen a la acumulación de grasa en el cuerpo, aunque los más destacados son la ingesta excesiva de calorías, la genética y los cambios hormonales.
Si quieres saber más sobre cómo se acumula la grasa, hablamos ampliamente sobre la grasa localizada en este artículo.
Los lugares preferidos por la grasa son los muslos, las caderas, el abdomen y los glúteos. No se acumula igual en todas las personas. Lamentablemente no hay una receta común, ni tan siquiera se acumula de la misma manera en hombres y mujeres.
Además de la salud, la temida grasa provoca rechazo y, a veces, puede mermar la confianza de las personas. Afortunadamente, tenemos muchas formas de combatirla, aunque requieren esfuerzo y mucha paciencia.
Bibliografía:
- Juhász M, Korta D, Mesinkovska NA. A Review of the Use of Ultrasound for Skin Tightening, Body Contouring, and Cellulite Reduction in Dermatology. Dermatol Surg. 2018 Jul;44(7):949-963. doi: 10.1097/DSS.0000000000001551. PMID: 29846343.
