En nuestra sociedad, el cabello está considerado una parte importante de nuestra apariencia. Para muchas personas supone una fuente de confianza y autoestima. O, dicho de otra manera, para quienes sufren la pérdida del cabello, esto puede suponer una falta de confianza y autoestima.
Un ejemplo de la importancia que se le da al cabello es que en España el uso de tratamientos capilares están en ascenso. Según estudios de mercado, se estima que la industria de productos para el cuidado del cabello supera los 1.500 millones de euros.
En el año 2020, el mercado global de productos para el cuidado del cabello se estimó en alrededor de 81 mil millones de euros.
¿Qué provoca que el pelo esté fuerte?
Mantener un cabello fuerte y saludable puede ser un desafío para algunas personas, ya que está influenciada por diversos factores, algunos de los cuales quedan fuera de nuestra acción. Influyen la genética, el envejecimiento, algunos medicamentos, componentes hormonales, circunstancias ambientales e incluso nuestra dieta.
- Los cambios hormonales pueden influir en la salud del cabello. Desequilibrios hormonales, como los que ocurren durante el embarazo, la menopausia o ciertas condiciones médicas, pueden provocar debilitamiento y pérdida de cabello.
- El estrés crónico puede desencadenar la caída del cabello. El estrés físico o emocional puede interrumpir el ciclo de crecimiento del cabello, haciendo que más folículos capilares pasen a la fase de reposo y, eventualmente, caigan. La reducción del estrés y la implementación de técnicas de manejo del estrés pueden ayudar a preservar la salud capilar.
- La predisposición genética juega un papel importante en la salud capilar. Algunas personas pueden heredar una mayor sensibilidad a las hormonas que afectan el ciclo de crecimiento del cabello, lo que puede llevar a una pérdida de cabello gradual o patrones de adelgazamiento.
- La exposición a factores ambientales agresivos, como la radiación UV, la contaminación, los productos químicos agresivos para el cabello y el uso excesivo de herramientas de peinado con calor, puede dañar la estructura del cabello y hacerlo más propenso a la rotura y la caída.
- Una alimentación deficiente puede tener un impacto negativo en la salud del cabello. La falta de nutrientes esenciales, como proteínas, vitaminas, minerales y ácidos grasos esenciales, puede debilitar el cabello y afectar su crecimiento.
Qué comer para mantener fuerte el cabello
A pesar de que existen numerosos tratamientos disponibles, mediante la nutrición podemos jugar un papel crucial en el mantenimiento y fortalecimiento del cabello.
Una dieta equilibrada y variada, que incluya proteínas, ácidos grasos omega-3, vitaminas del complejo B, hierro y antioxidantes, puede contribuir a fortalecer el cabello y promover su crecimiento. A continuación, analizamos algunos de estos alimentos que pueden ayudarnos a mantener un cabello fuerte y brillante.
Proteínas
Las proteínas son los bloques de construcción del cabello y son esenciales para su crecimiento y fortaleza. Por eso es importante añadir en la dieta alimentos como carne magra, pescado, huevos, legumbres, nueces y productos lácteos.
El cabello está compuesto principalmente de una proteína llamada queratina, que representa aproximadamente el 90% de su estructura. Las proteínas en la dieta desempeñan un papel crucial en la reparación y regeneración del cabello dañado, ya que son responsables de su fuerza, elasticidad y resistencia a la tracción.
También están involucradas en la regulación de la producción de sebo en el cuero cabelludo, que es un aceite natural producido por las glándulas sebáceas. Su equilibrio es esencial para mantener el cabello hidratado y protegido.
Omega-3
Los ácidos grasos omega-3, como los que se encuentran en los pescados grasos, las semillas de chía y las nueces, son esenciales para un cuero cabelludo saludable, debido a sus propiedades antiinflamatorias, hidratantes y promotoras del crecimiento. Pueden ayudar a reducir la inflamación que puede afectar el crecimiento del cabello.
Vitamina B
Las vitaminas del complejo B, como la biotina (vitamina B7) y el ácido fólico (vitamina B9), son esenciales para la salud del cabello. La biotina promueve el crecimiento del cabello y es esencial para la síntesis de queratina. Se encuentra en alimentos como huevos, legumbres, nueces y pescado. El ácido fólico se encuentra en verduras de hoja verde, frutas cítricas y cereales integrales.
Además, la niacina (vitamina B3) favorece la circulación sanguínea en el cuerpo cabelludo. El ácido pantoténico (vitamina B5) desempeña un papel clave en el metabolismo de las grasas y proteínas, lo que es esencial para el crecimiento y fortalecimiento del cabello. Ayuda a mantener la flexibilidad, la fuerza y la hidratación del cabello, evitando la sequedad y la fragilidad. Estos dos complejos de la vitamina B los encontramos en carne de aves, mariscos, carne de cerdo, hígado, legumbres, arroz integral y frutos secos.
Y la cobalamina (vitamina B12) está involucrada en la producción de células sanguíneas y la síntesis de ADN, lo que es esencial para el crecimiento del cabello. Una deficiencia de vitamina B12 puede provocar problemas capilares como la pérdida de cabello. La encontramos en carnes, pescados, mariscos, huevos y lácteos.
La deficiencia de hierro es posiblemente la causa más conocida de debilitamiento del cabello y puede contribuir a su caída. Para evitarlo, hay que consumir alimentos como carne roja magra, espinacas, lentejas y cereales fortificados.
Antioxidantes
Los antioxidantes, como las vitaminas C y E, ayudan a proteger el cabello de los daños causados por los radicales libres, entre ellos el estrés oxidativo, que puede dañar el ADN, las proteínas y los lípidos en las células del cuero cabelludo y los folículos pilosos, lo que debilita el cabello y puede conducir a su caída.
Al reducir el estrés oxidativo y proteger las células del cuero cabelludo y los folículos pilosos, los antioxidantes también pueden estimular el crecimiento del cabello. También mejora la salud general del cuero cabelludo al reducir la inflamación y la irritación.
Para incluir antioxidantes en la alimentación, hay que consumir cítricos, bayas, aguacates, nueces y verduras de hoja verde en tu dieta para obtener una dosis saludable de antioxidantes.
Si tienes problemas capilares, como la pérdida excesiva de cabello o cualquier otra preocupación, es recomendable que busques en primer lugar la opinión de un especialista en salud capilar para un diagnóstico adecuado.